Fase gustativa de Juvé&Camps Blanc de Noirs Reserva 2012

Venga Compos, que ya llevabas tres o cuatro tragos largos

Es pura crema en boca...

Coincido en que el carbonico tiene a día d hoy demasiado protagonismo

No vuelvo a notar la variedad tinta por ningún lado. A ciegas me tiro de cabeza con un xarel.lo y un macabeu

Llevo con una copa servida más de tres cuartos de hora y aguanta el tipo con una entereza increíble: está fresquísimo y elegantísimo. Una delicia.

En boca es fresco, notas cítricas suaves y fruta de hueso iniciales...

Para mi gusto el carbonico lo tiene un poco subido, puede ser por su juventud.

Más bien suave, pero lo mejor ese carbónico taaaaan bien integrado. Es que llevo una rachita últimamente de carbónicos desmedidos...

Vinosidad, burbujas que alegran el paso, acidez un tanto justa. Rapidez de paso media y buena persistencia, glicérico.

Ahora sí te doy lo de las frutas rojas, para mí que alguien ha estado haciendo trampas.

Un cava serio que mira a Francia.

...tacto cremoso, le acompañan notas de bolleria, ligero toque goloso...

A mí todo lo contrario. Lo que más me gusta...

Y bastante persistente.

En boca tiene una buena acidez. La burbuja está más presente de lo que indicaba la visual. Se expande en cuanto entra en contacto con la lengua y el paladar, como una mousse. Ligeramente vinoso, en boca es de corte menos maduro de lo que parecía inicialmente en nariz cuando se expresaba tan goloso, es más serio, más fresco. Buenos amargos y persistencia media con recuerdos frutales.

Ese recuerdo de cremosidad del carbónico te invita a volver a beber

En boca tiene un ataque cremoso y algo fresco, al tiempo saca la musculatura y muestra su cuerpo, atractivo pero no exuberante, su paso es sedoso, suave, cremoso otra vez, se deshace la crema y deja las papilas marcadas con su sabor, que nos acompaña durante tiempo. Deja un regusto muy sabroso y agradable con notas de todo lo percibido en nariz, esa fruta blanca asada, esa cereza en licor, esos recuerdos de horno y esos anisados y pizca de regaliz que sobrevuela nuestro imaginario.