Peña La Verema

Hay sitio para todos

El mercado del vino es tan amplio que hay sitio para todo tipo de caldos siempre y cuando estén elaborados siguiendo unos criterios de calidad mínimos. El ejemplo más claro lo tenemos en los llamados productores del “Nuevo Mundo” que son capaces de colocar en las estanterías de un supermercado europeo un vino muy digno por bastante menos de 6 euros. Dependiendo de la ocasión, o de a quien se quiera honrar, se elegirá un vino u otro pero lo que es indudable es que cada tipo de vino tiene su lugar en el mercado. No todos los días uno va a descorchar una botella de 24 euros pues si esto se convirtiera en un hecho rutinario se acabaría rompiendo la “magia” que implica abrir una botella para una ocasión especial. Por ello, en esta cata el organizador de la misma, nuestro compañero y tesorero de la Penya, Pepe Sempere, quiso elegir cuatro caldos elaborados en nuestro país que tuvieran como denominador común que su precio rondara en torno a los 6 euros.

Esta tuvo lugar el pasado 17 de Septiembre en Mantequerías Castillo y se caracterizó, entre otras cosas, por un hecho inusitado como fue la ausencia de Juan Such por motivos laborales. ¿Por qué resalto este hecho? Sencillamene porque a lo largo de la existencia de esta “bendita” Penya nuestro querido amigo tan sólo había faltado a una sola cata y ello debido a que a principios de los noventa estaba realizando una estancia posdoctoral en el Reino Unido.

El primer vino catado fue un Vega Ferrera 2000 de la D.O. Somontano elaborado con Cabernet Sauvignon y Tempranillo por Bodegas Fábregas situada en la concurrida carretera de Barbastro a Naval (quien haya visitado esta zona se habrá dado cuenta que las mayoría de las bodegas están situadas allí). Este vino permaneció seis meses en barricas de roble francés y diez más en botella. El segundo de la noche fue un Viña 105 2001 elaborado por Telmo Rodríguez, uno de los más inquietos flying winemakers españoles, bajo la D.O. Cigales. Las varietales utilizadas son la Tempranillo y la Garnacha procedentes de viñedos de 15 años de edad a una altitud de 710 metros. El siguiente vino catado fue un Finca Antigua 2000 de la D.O. La Mancha elaborado por la Bodega de la Familia Martínez Bujanda en Los Hinojosos (Cuenca) que, como otros tantos elaboradores de prestigio, han decidido ampliar sus horizontes probando fortuna en otras denominaciones de origen que hasta hace pocos años se caracterizaban por la excesiva presencia de los graneles. Y, el último, fue un Margalló 2000 de la D.O. Penedés elaborado por Bodegas Jané Ventura en el Vendrell (Baix Penedès) con las varietales Ull de llebre (Tempranillo) y Merlot. Este es un vino muy Mediterráneo, que muestra claramente las características del entorno caracterizado por pobreza del terreno y por la bonanza climatológica.

Las puntuaciones obtenidas y los comentarios de cata fueron los siguientes: :

1º Finca Antigua 2000: D.O. La Mancha. Bodegas Familia Martínez Bujanda. Tempranillo 65%, Cabernet Sauvignon 25% y Merlot 10%. Crianza en barricas nuevas de roble americano y francés durante 14 meses. 13 % volumen.
Puntuación: 7.0
Color granate brillante con ribete moratoso. Nariz muy expresiva con recuerdos a fruta compotada, madera, incienso y sándalo. En boca es fresco, con buena intensidad, acidez presente y bastante largo.

2º Vega Ferrera 2000: D.O. Somontano. Bodega Fábregas. 75% Cabernet Sauvignon y 30% Tempranillo. Crianza de 6 meses en barrica de roble francés y 10 meses de permanencia en botella. 13% volumen.
Puntuación: 7.0
Rojo picota con reflejos violáceos. Nariz con notas animales, cuero, tabaco, fruta negra y sotobosque. En boca es de cuerpo medio, tiene buen paso y presenta cierta acidez.

3º Margalló 2000: D.O. Penedés. Bodega Jané Ventura. 85% Ull de llebre y 15% Merlot. Crianza de 12 meses en barrica. 13,9% volumen.
Puntuación: 6.9
Rojo picota de buena capa. En nariz no es demasiado expresivo. Hay notas de tostados, café, fruta negra y sotobosque. Tiene un punto alcohólico. En boca es redondo, algo amargo y de persistencia media.

4º Viña 105 2001: D.O. Cigales. Compañía de vinos de Telmo Rodriguez. Elaborado con Tempreanilo y Garnacha. Sin crianza.. 13% volumen.
Puntuación: 6.5
Rojo frambuesa brillante de capa media. Aroma peculiar con recuerdos animales, de fondo de barrica y tostados (aunque no tiene crianza). En boca es ligero, presenta buena acidez y es muy largo.

Para la cena, Vicente Castillo nos preparó una selección de sus mejores productos. Empezamos con unos “envoltinos”, creación del propio Vicente, y elaborados con bonito, cogollos de Tudelana y queso Parmesano envuelto todo ello en una loncha de cecina. A continuación tomamos salmón salvaje de Carpier con mozzarella y una ensalada de cangrejo ruso Chatka que estaba de miedo. Luego, seguimos con atún en aceite del Consorcio con tomates valencianos del Perelló –quien diría que el tomate se iba a convertir en un producto de lujo- y una muestra de quesos de lo más variopinta (Ibores, Cabrales, Grullere, Roncal, Mahonés, Suizo, Gordonzzola, etc.). Finalmente, una selección de ibéricos acabó por tranquilizar nuestros jugos gástricos. Los vinos que acompañaron la cena fueron un Mataromera crianza de 1998 (pura tinta china; lo digo como un halago) y un Calzadilla Shyrah 2000 que se masticaba en la boca pues era muy carnoso y amplio y además tenía un punto final algo goloso. Para el postre, chocolates Belgas y un Castaño Monastrell Dulce.


Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar