Todos estamos acostumbrados a que la restauración multiplique por dos los precios de costo al público (probablemente sea más de dos veces su costo como restaurador) incluso más, pero lo que no pueden darte a elegir, sin carta (ni precios) son dos vinos en que valga como poco dos veces el precio de la otra opción, sin avisar y aprovechando su desconocimiento general de un vino local de producción limitada. Por cierto el vino estaba bueno y quizás lo valga en pVP y en restauración, pero cuando te dan a elegir dos cosas sin decirte el costo de las mismas deben decirte el precio.
Me pillaron y me molestó, sobre todo porque había gente que, aún pudiendo, no le parece bien pagar 55€ por una botella de vino - y más si es desconocido-, aunque luego se compraron trufas.
Saludos