Gratísima noticia que los hijos de la gran Pepa vuelvan a las cocinas. Yo conocí a una en el hotel Rosa de Denia. Por cierto, el menú del día del rte. del hotel era muy bueno. No merecía la pena salir a comer a otro sitio. ¡Ah!, los postres eran extraordinarios. Saludos desde la veraniega Comillas.