Después de tan completo y prolijo comentario, ¿qué más podemos añadir los demás? Fellicitarte y felicitar a la bodega y a Gabriel Raya y a su padre, pues nos recibieron como si nos conocieran de toda la vida, nos dieron a probar todo lo que quisimos y pudimos y que son encantadores y que por supuesto nos alegrará verlos de nuevo cuando volvamos a Sanlúcar. De momento nos complace beber esta magnífica manzanilla