Hola Javier,
Cuando el camarero vino a traerme el movil para decirme que Javier Torres queria hablar conmigo, me levanté como un autómata, sin comprender muy bien lo que pasaba. Mi mujer, MC, repetia sin cese, "eso es una broma" hasta que se dió cuenta que nadie sabia que estabamos alli esa noche excepto los hermanos Torres y nuestra hija que estaba en ese momento en el AVE de regreso a Madrid, que es donde vive. Es la primera vez que me pasa una cosa tan increible y sobre todo intercambiando impresiones alrededor de 10 m al teléfono . Fue un verdadero detallazo, que no olvidaré nunca y que me emocionó particularmente.
No te lo pierdas.
Un abrazo