Cuando vas a comer en plan trabajo, no se suele llevar la idea de disfrutar, solo de comer y seguir. Pero si ya ves alubias y bacalao, los jugos gastricos se ponen en marcha y de forma súbita se anima la zona cerebral de la serotonina se activa, y ...¡¡para luego decaer¡¡¡ No hay derecho.