Como aficionado sin mucho criterio, para mí la mineralidad la da el terruño. Solo hace falta darse una vuelta por el Priorat, la Ribeira Sacra o el Loira por poner algunos ejemplos. Los minerales por sí solos apenas huelen pero expuestos al sol y a la lluvia si. Matices como el petricor, el grafito, la licorella o pizarra o las piedras de rio son aromas que considero no son muy difíciles de percibir.