No era un restaurante que me llamara la atención, pero entre el excelente programa de los gemelos (por cierto, la tapa de erizo la cocinó uno de ellos esta semana!) y los últimos comentarios me están entrando ganas de hacerles la visita. Lo de los vinos sí que no lo entiendo, la verdad. En un sitio de ese nivel se tendría que poder disfrutar de un buen maridaje sin dejarte el sueldo. Saludos,
Feran