Hola a todos,
desde mi punto de vista en este asunto, como en muchos otros, se coge el rábano por las hojas.
Al consumidor hay que darle productos de calidad. Así de sencillo. No se puede pretender que un porcentaje, del tipo que sea, se conviertan en catadores de aceite, de vino, de pan y de su tía en bote. No. Esto no va así, porque luego se rasgarán las vestiduras con la falta de cultura del consumidor, lo poco que se consume, que no está dispuesto a pagar el precio que bla, bla, bla... ¡Pero si esta historia ya nos la conocemos todos!
No, al consumidor hay que darle producto de calidad y permitiéndole conocer en base a la información que ha de darsele.
Al consumidor, hay que darle un aceite en el que en el etiquetado se le diga la calidad, las variedades, el tipo de cultivo (sí, eco/bio, nada...), cuándo fueron recolectadas, cómo fueron elaboradas y el consumo preferente. Y alguna cosa más que seguro se me pasa.
Es el propio sector (sí, me refiero a los elaboradores) en este caso, como en muchos otros, el que no tiene ninguna gana de ser honesto y apunta al consumidor y su incultura.
Saludos,
Jose