Buenooooooooo, qué alegría volver a leerte Javier!
Y encima me traes un restaurante en el que no he estado y que tenía apuntado en la agenda con "dudas"... Dudas que se han disipando leyendo tu magnífica crónica: tengo que ir sí o sí, por lo civil o por lo criminal!
Un abrazo
Aurelio