Qué gran artículo, pero un no menos gran restaurante, con una maestra-artista en su cocina.
Os felicito a las partes.
Te agradezco que me menciones.
Ha leído este artículo Estela y ha dicho, nada más finalizar:
- Ahora mismo cogía un avión a Valencia para cenar en La Salita.
- También ha dicho, lo reflejado por Aurelio, es idéntico a las sensaciones que he sacado yo, cada vez que he comido donde Begoña.
Un saludo para Jorne y Sergio, si me leen.
Gabriel