Sólo puedo decirte gracias Eugenio.
Gracias por todo lo que he aprendido y disfrutado leyéndote.
Gracias por hacer del mundo del vino y la gastronomía una delicia.
Gracias por hacerme saborear en la distancia los vinos y platos que tu tomabas.
Gracias por despertar en mi el gusanillo que querer probar todos los vinos del mundo.
Gracias por ser tan apasionado del mundo del champagne y comentárnoslo.
Gracias por tus fotos y tus escritos.
Gracias, en definitiva, por habernos dado la oportunidad de seguir desde la distancia tus andanzas, tus aventuras que eran como nuestras, en cada vino, cada plato de tu casa, cada aroma y cada historia.
Ha sido un verdadero placer ser un visitante de tu enorme blog.
Por último, quiero que sepas que gracias a este espacio, en Murcia la gente te conoce como "Eugenio, ¡Que tío!". Por cierto, no se de nadie que haya estado contigo realmente, por aquí eres como el protagonista de un cantar de gesta (Permíteme esta pequeña broma para decirte hasta luego).
Un saludo.