Color rojo cereza, menisco rubi, capa media-alta, limpio, brillante, fina lágrima bien tintada.
En nariz hay buena intensidad de aromas de fruta negra madurada, tostados de la crianza, notas herbáceas, especias (clavo, vainilla), monte bajo, ahumados; complejo, amplio, interesante.
En boca es potente, con buena fruta negra madura, astringencia, taninos algo secantes, fruta madura, regaliz, algo licoroso, especiado, muy buena acidez, notas balsámicas, ahumados. Persistencia alta.
Un poquito más de tiempo por favor que se pondrá genial.
Dedicada a Ferrán Adriá.

Color rojo cereza, ribete rojo intenso, capa alta y fina lágrima bien tintada. En nariz parece un desfile de matices que van en fila india, al principio destaca una fruta negra fresca y bien madurada al que le siguen de inmediato unas notas de tostados de la barrica y cenizas algo calientes, a continuación notas herbáceas, suaves especiados (clavo) con suaves notas algo dulzonas (recuerdan la vainilla), barnices, notas de terruño, ligeros apuntes licorosos y un fondo de monte bajo (musgo). Con el tiempo el vino se va calmando y surgen las notas de fruta roja en compota, sensaciones de brasa y ligeros caramelos algo especiados. En boca tiene una potente entrada, astringencia algo verdosa muy intensa, notable recorrido con mucho nervio, musculoso, notas amargas intensas que llegan a resultar bastante secantes, fruta madura, tostados por pulir, especiado, muy buena acidez, mucha estructura y sensaciones balsámicas muy marcadas con recuerdos de regaliz negro acompañadas de notas licorosas, muy persistente. Final largo, postgusto de fruta madura y retronasal bastante ahumado.

Un muy buen resultado pero que necesita una larga estancia en botella.

Más info en: http://www.elvi.net/2013/02/14/matador-ferran-adria-carsten-holler-por-clos-d-agon-2009/

Aunque mejorará con el tiempo he probado el último vino del número de la revista Matador, que va dedicado a otro Hospitalense, Ferran Adrià. Es una botella colorida y preciosa que reproduce una obra del artista alemán Carsten Höller y con algun elemento recordando a Ferran Adrià. El vino es de Clos d'Agon de color rojo granate oscuro. En nariz aparecen unos aromas a fruta roja, tostados y especias. En boca es una sensación enorme, amplia de entrada de fruta, con unos buenos taninos. Es un vino muy rico.