Excelente momento de consumo

Qué hay que decir de esta bodega. Corcho enormemente largo, no parece el corcho de un vino joven ni de un semicrianza. Es un corcho que, perfectamente podría ir dirigido a un vino de Reserva o Gran Reserva. Un corcho de muchísima calidad que representa el mimo por los pequeños detalles de esta gran bodega.

Oxigenado durante más de 1 hora.

Visual: rojo picota de capa media-alta, ribete cereza-granate transparente, en pleno momento de consumo por la visual, muy limpio y brillante, abundantísima lágrima muy densa y de rápida caída, muy glicérico.

Nariz: un roble más evolucionado que otros que he tomado. Son casi 3 años ya. Muy aromático y complejo. Fruta roja madura licorosa todavía exuberante y expresiva, muchísimos especiados, maderas finas de roble francés, clavo, tostados, toffee, chocolate amargo, café negro, regaliz, mentolados y balsámicos sensacionales. Un punto inicial de toque a aromas terciarios como cuero, piel de animal y desván que se va disipando con la aireación preceptiva.

Boca: entrada jugosa, carnosa, sedosa, taninos que existen pero ya bastante pulidos y excelentemente integrados, pocos signos de verdor salvo un pelín en las encías en el final, muy fácil de beber pero con enjundia, con muy buen volumen en boca, algo licoroso y muy goloso. El paso por boca es de vino de buen nivel (o al menos eso me parece a mí). El final es medio-largo con retronasal y retrogusto entre dulces y amargos muy agradables y que invitan a otra copa.

Un vino que no suele fallar. Excelente en esta añada 2010. Para mí, casi tan buena como la 2009 (de las que aún me queda algo por ahí). Probaremos también, en lo sucesivo, las añadas 2011 y 2012 de las que ya tengo botellas (sobre todo de la 2012 que poseo hasta 9 botellas).

La RCP me parece muy buena y, sea por lo que sea, es un vino "fetiche" para mucha gente, el de mejor RCP de la bodega, y que año tras año se agota en muy poco tiempo.