Extraordinario

Prefacio: hay botellas que, por lo que sea, sabes que te van ofrecer lo mejor. Algo me dijo que ésta iba a ser una de ellas

Sin decantar (aunque es aconsable dada la presencia de sedimentos). Recien abierto.

Vista. Picota oscuro. Ribetes burdeos con levísmos reflejos teja. Capa alta. lagrima fina.

Nariz: Enorme desde el inicio. Amplísimo abanico de fruta roja (frambuesas, fresas, grosellas, ceerezas). Balsamicos, cacaos, regaliz. Tierra Humeda, Torrefactos.

Boca: Ataque suave, sin agresividad. Gran paso boca, Redondo. Elegante. Equilibrado. Taninos perfectamente domados. Amplísimo en boca a la par que ligero. Paso por boca dulce (lo mejor), con toques de canela. Fresas, frambuesas, vainilla, leve nota de licor; final de cafe con presencia de cacaos.

Retronasal extraordinaria. Postgusto larguísimo.

Sinceramente, después de la regular experiencia del 04 (quizá abierta demasiado pronto ¿las ansias?) me reencuentro con un vino extraordinario, completo, perfectamente delimitado, goloso, pleno: de lo mejor que he probado en los 2 ó 3 últimos años (y eso que, por fortuna, ha habido competidores de postín).

Tomado con un buen solomillo y queso comté de postre. Daba igual, ambos en segundo (o tercer) plano. Una simple excusa para seguir bebiendo; grandísimo vino que iba mejorando en puntuación con cada copa. De hecho 3 fueron las (generosas) copas bebidas antes de empezar.

Un adicional. La botella fue casi entera para mí (cosas de la dieta prebikini de la jefa). Dios es sabio y justo. Decir que no sobró una copa para la cena es absolutamente innecesario.

Una auténtica maravilla.