Finde en Logroño

Consulta con marianjels, te cambio los dos olivos, ojo el 96 eh, por un Miquelius, (LEASE 1 MIQUELIUS) y porque eres tu eh¡’¡¡¡¡ ante que me arrepienta contestame anda.....

";Nos tomamos las tres botellas juntos por ser tú";.

Disculpadnos por el retraso a la hora de comentar el fin de semana pero hemos estado hasta arriba de trabajo

Gracias:

1 - A todos los que os acercasteis a La Rioja desde La Mancha, Barcelona, La Puebla de Arganzón, Bilbao, Castro y, sobre todo Durango, con todo lo que ello supone de traslados, costes, movilizaciones de familia, ";colocación"; de críos, etc.

2 - A Fernando Remírez de Ganuza por atender con su amabilidad habitual a los manchegos, La Taberna y ";el Loma";

3 - A Miguel Angel de Gregorio por levantarse a las cinco de la mañana y trasladarse en plena vendimia manchega hasta Briones para hacernos un viaje por diferentes pagos y darnos a catar 12 vinos diferentes en función del terroir. Una clara lección de como, a pesar del mismo año, variedad y elaborador, el terroir existe. Muy didáctico

4 - A nuestro buen amigo Jesús Madrazo porque ser el auténtico artífice de que nos juntásemos las Peñas hermanadas y hacernos disfrutar con esos maravillosos Olivos y Gracianos. Todavía recordamos el domingo a la mañana a Thurston sacando fotos de las viñas, la casa, el olivo... con su frase Contino tiene algo que enamora, si antes me encantaban sus vinos ahora, tras ver la bodega ni te cuento.

5 - A Choche por amenizar con chistes el viaje ";interbodegas";. Creíamos que el chófer del butu se salía en una curva porque era el que más se reía.

6 - A Juan Nales del restaurante ";Las Duelas"; por tratarnos tan profesionalmente como siempre pero con un extra de cariño que siempre se agradece.

Nos vemos el próximo año en La Mancha para ";desempatar";. Calentemos motores

Nuria y Gonzalo (Peña Bilbao)

Que bien LOMA todo lo que cuentas, lo de la Romeria y lo de la visita a MARIA-JOSE LdeH, haces muy bien en transmitirles mis sensaciones amigo, un fuerte abrazo¡

Disculpad la tardanza pero la falta de infraestructura hace que uno ande siempre con retrasos.
Maravilloso fin de semana. Gracias a Miguel Angel y a Chus; gracias a Nuria y Gonzalo por la perfecta organización pero sobre todo por el cariño...
Ha sido un auténtico placer compartir esos momentos con los chicos-as de Barcelona, La Mancha...sin olvidarme de mis compañeros de Peña.
Un abrazo

Leyendo todos los mensajes que habéis puesto sobre vuestra experiencia de este pasado fin de semana he de reconocer que he sentido una envidia sana y, también, una cierta nostalgia porque es una experiencia muy parecida (con Chus, Miguel Angel,..) a la que viví con otros compañeros de Verema hace un par de años.

Creo que es muy importante para los buenos aficionados al mundo del vino impregnarse del entorno que rodea a todo este proceso (las bodegas, los viñedos, los paisajes, los viticultores, los enólogos,...) y si encima lo haces con gente de la que más valoras en este contexto, pues la experiencia ya es sublime. Después de este tipo de situaciones ves y valoras los vinos desde una perspectiva muy diferente (no sé si calificarla de más humana, más sentimental, más emotiva), o al menos a mí me sucede así. En una pequeñita escala los Encuentros Verema los pensamos con esa filosofía, la de poner en contacto directo (más social que comercial) a los consumidores y usuarios de Verema con los enólogos y productores.

No sé si desde el punto de vista de un proceso de cata más o menos profesional este tipo de ";añadidos subjetivos"; (conocimiento de las personas que están detrás de los proyectos y de las bodegas) en la degustación de los vinos será muy correcta pero, desde luego, yo disfruto mucho más de los vinos cuando conozco su historia, su entorno de producción y la filosofía de las personas que lo hacen que cuando esto último me es ajeno. No sé si a vosotros os pasará lo mismo.

Lo has descrito muy bien amigo José. Creo que es importante ";impregnarse"; del ambiente que rodea el mundo del vino y las bodegas porque ello te hace entender muchas cosas que, desde la profesionalidad, neutralidad y objetividad de un catador, no se palpan.

¿Qué más da si somos o no estrictos y objetivos a la hora de calificar un vino cuando de lo que se trata es de disfrutar con una copa del mismo?

Nuria Navarro^Peña Bilbao