Uno de los iniciadores de la "nueva ola" de vinos mexicanos del Valle de

Uno de los iniciadores de la "nueva ola" de vinos mexicanos del Valle de Guadalupe fué el enólogo chileno José Luis Durand. El llegó a México traido por Domecq. En aquel entocnes, Domecq vinificaba básicamente Cabernet y Merlot, y probablemente algo de Syrah, Zinfandel, y Petit Syrah. Hacían 3 tipos de vino: Los Chateau Domecq que estaban aceptables, los X-A que son monovarietales sencillos, y un vino muy ordinario llamado Padre Kino, que venía en una botella de vidrio parecida a un florero con tapa metálica. Pues este enólogo descubrió que la uva con la que se elaboraba el Padre Kino era de excelente calidad. Tomo algo de es uva y la vinificó como Dios manda, y resultó en un vino estupendo de alta calidad. Sus jefes se molestaron y lo echaron de la compañía. Como indemnización, pidió que le entregaran el vino, el cual embotelló con el nombre de Icaro y en su tiempo fué el mejor y mas caro vino de México.