Ánimo Quini
Jordi_Melendo
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He leído con atención en la prensa la noticia del emotivo homenaje que ha recibido en Gijón, uno de los más entrañables futbolistas que han formado parte de las filas del F.C. Barcelona, mi equipo del alma. Se trata de Enrique Castro Quini, ex jugador del Sporting de Gijón y del Barça, quien pasa un mal momento ya que está recibiendo tratamiento por un cáncer de garganta. Su hermano fue un gran guardameta del Sporting quien falleció de manera heroica. El pasado sábado se bautizó oficialmente el parque situado junto al Molinón con el nombre de “Hermanos Castro”.
Mi colegio estaba cerca del estadio del F.C. Barcelona, por lo que hacía numerosas “campanas” para ir a conseguir los autógrafos de mis ídolos de la época: Alexanko, Shuster, Maradona, Migueli, Artola… y Quini, entre muchos otros. Yo nací y he vivido casi toda mi vida en el barrio de Gràcia de Barcelona y uno de mis vecinos era Bartolomé Márquez, a quien acaba de fichar el Espanyol como entrenador. “Tintín” Márquez, que en aquella época triunfaba como futbolista en el Espanyol sufrió una hepatitis que le obligó a estar varios meses de reposo en cama. Un día, después de los entrenamientos en Can Barça, hablé con Quini y le comenté que Márquez pasaba por esta situación. Quini me citó para un día de la semana siguiente para que le esperara en las puertas del Nou Camp para ir juntos a casa de Márquez y darle una sorpresa. Ese mismo día fui a casa de “Tintín” y le dije: La semana que viene vendré con un amigo que te quiere animar. Llegó el día esperado y Quini, junto a su mujer, fue puntual a la cita. Quini conduciendo, yo sentado en el coche a su derecha… que emociones ir con el durante ese trayecto y ver las caras de la gente cuando lo reconocían en cada semáforo. Recuerdo ver la cara de Bartolomé Márquez cuando vio que el amigo de cuya visita le había anticipado era Enrique Castro Quini, uno de los astros de la historia del fútbol español.
Han pasado muchísimos años y no he vuelto a tener más contacto con ninguno de los dos. Ya tengo las direcciones de correo electrónico del Real Sporting de Gijón y del R.C.E. Espanyol de Barcelona para que les llegue este comentario. Seguro que recordaran ese día. A Bartolomé Sánchez le desearé los mayores éxitos como nuevo entrenador del Espanyol (aun que yo sea del Barça). A Quini le daré muchos ánimos en el mal momento por el que pasa, desearle una pronta recuperación y agradecerle la bondad que derrocha. Y felicitarle por ese merecido ascenso del Sporting a Primera División.
El de la foto soy yo, con Quini, pero con 30 años menos.
Mi colegio estaba cerca del estadio del F.C. Barcelona, por lo que hacía numerosas “campanas” para ir a conseguir los autógrafos de mis ídolos de la época: Alexanko, Shuster, Maradona, Migueli, Artola… y Quini, entre muchos otros. Yo nací y he vivido casi toda mi vida en el barrio de Gràcia de Barcelona y uno de mis vecinos era Bartolomé Márquez, a quien acaba de fichar el Espanyol como entrenador. “Tintín” Márquez, que en aquella época triunfaba como futbolista en el Espanyol sufrió una hepatitis que le obligó a estar varios meses de reposo en cama. Un día, después de los entrenamientos en Can Barça, hablé con Quini y le comenté que Márquez pasaba por esta situación. Quini me citó para un día de la semana siguiente para que le esperara en las puertas del Nou Camp para ir juntos a casa de Márquez y darle una sorpresa. Ese mismo día fui a casa de “Tintín” y le dije: La semana que viene vendré con un amigo que te quiere animar. Llegó el día esperado y Quini, junto a su mujer, fue puntual a la cita. Quini conduciendo, yo sentado en el coche a su derecha… que emociones ir con el durante ese trayecto y ver las caras de la gente cuando lo reconocían en cada semáforo. Recuerdo ver la cara de Bartolomé Márquez cuando vio que el amigo de cuya visita le había anticipado era Enrique Castro Quini, uno de los astros de la historia del fútbol español.
Han pasado muchísimos años y no he vuelto a tener más contacto con ninguno de los dos. Ya tengo las direcciones de correo electrónico del Real Sporting de Gijón y del R.C.E. Espanyol de Barcelona para que les llegue este comentario. Seguro que recordaran ese día. A Bartolomé Sánchez le desearé los mayores éxitos como nuevo entrenador del Espanyol (aun que yo sea del Barça). A Quini le daré muchos ánimos en el mal momento por el que pasa, desearle una pronta recuperación y agradecerle la bondad que derrocha. Y felicitarle por ese merecido ascenso del Sporting a Primera División.
El de la foto soy yo, con Quini, pero con 30 años menos.