Vino y arte : rubáiyát-omar khayam.
Juan Cuatrecasas
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Ungid mi cuerpo con vino después
de que mis labios hayan entonado
el último salmo en honor a las
ramas de la vid, y estad seguros de
que el día de la resurrección
la escoba del ángel encargado de
juntar las partículas de mi polvo
barra el umbral de la taberna.