Tal como habíamos previsto tras nuestra visita de diciembre, reservamos con grandes expectativas una mesa en el nuevo comedor interior de la Taverna para la noche del lunes 11 de marzo a las 21 horas. Al llegar al restaurante, la recepción fue mas bien fría y distante. Me explico : Al entrar en el bar del restaurante y declinar mi reserva a un camarero de la barra, Manuel Simoes, jefe de sala, sumiller y copropietario, apoyado en la barra del bar, cual un juez esperando al reo de turno, sin ni siquiera levantar la cabeza de su libreta de reservas, dio instrucciones a una colaboradora para que nos colocasen en una mesa en el pasillo a la entrada del bar, como en nuestra primera visita en diciembre, pero yo no había reservado ahí, yo lo había hecho y hacia ya algún tiempo en el nuevo comedor interior. Ante mi estupor y mi viva reclamación y sin siquiera disculparse y sin mirarme a los ojos, de manera prepotente volvió a dar instrucciones a su colaboradora para que nos colocasen en el nuevo comedor.
Dicho esto, pasemos a las cosas agradables. No voy a hacer una pequeña historia del restaurante porque ya lo hice en mi anterior comentario, me voy a ceñir unicamente a la descripción de la nueva pequeña sala, digna de un estrellado. Con paredes recubiertas de madera y en sus muros cuadros de Muxart, este bonito comedor de colores claros, sin ventanas pero luminoso, con las mesas bien vestidas, bien separadas las unas de las otras, con buena vajilla y cubertería, con copas y vasos Riedel, debe tener una capacidad para unas 30 personas. En un extremo del comedor se encuentra una gran cocina a la vista donde Toni Simoes dirige con maestría los fogones y en el otro extremo la bodega con mas de 700 botellas. El Servicio de sala es atento y profesional y el Servicio del vino es bueno.
Optamos por cenar a la carta,
Para empezar compartimos
Bravas de la Taverna Muy buenas, se trata de una adaptación de las patatas bravas de Sergi Arola.
Bombones de calamar con nabos y lascas de trufa Buena técnica en la elaboración de los bombones, buena presentación y sobre todo excelente plato cargado de sabor, para repetir... (ver foto)
Murgules(Colmenillas) con crema de foie y trufa Las colmenillas eran lógicamente liofilizadas, pues no es su época, pero estaban perfectamente cocinadas como si hubiesen estado cogidas poco tiempo antes. Un plato de sabor intenso y perfectamente elaborado.
Alitas de pollo con zamburiñas También un plato de 10.
Seguimos con los segundos, que también compartimos :
Cochinillo asado con "pastel" de manzana y ensalada verde Cocción perfecta.Excelente (ver foto)
Lubina salvaje con cocotxas de merluza y espárragos trigueros Un plato perfecto. (ver foto)
Para acompañar la cena tomamos un buen pan con tomate. Para beber optamos por un vino blanco con crianza de 6 meses en barrica nueva de roble francésL'Equilibrista 2012 DO Catalunya elaborado por la Bodega Ca N'Estruc de Esparreguera (Barcelona), variedad 100% Xarel-lo. Me pareció, largo en boca, fresco y mineral, me gustó mucho.
No hubo cabida para el postre y finalizamos con dos buenos cafés y unas muy buenas "mignardises" Financiers, Trufas y Nubes
La cuenta ascendió a 77,65 €/persona. Buena RCP. Muy recomendable. Si sigue en esta linea, se va a convertir en una cita fija en mis desplazamientos a Barcelona.
Aclaraciones sobre el comentario anterior:
Acabo de recibir un correo electronico de disculpa de la parte de Manuel Simoes, en relacion con mi acogida al restaurante, que lo honorifica y que pone en evidencia su valor professional y humano y que me ha profundamente emocionado.
A continuación transcribo el mail recibido :
Estimado sr,
Le escribo después de leer su crítica en nuestro sistema de reservas. Lamento de corazón que se sintiera así de mal tratado, para nada era mi intención, no suelo ser así sino todo lo contrario, no puedo justificarlo de ninguna manera, aunque he pasado unas mañas semanas debido a unas operaciones a las que me he sometido y no tenía el carácter de siempre, se que nos es su problema y que no tiene excusa porque llevo dedicándome desde los trece años a la hostelería y se que el show must go. Simplemente le escribo para que me disculpe y decirle que no volverá a pasar. Espero que vuelvan al restaurant y arreglar el error. De nuevo le pido disculpas y muchas gracias por todo.