Mucho mejor la añada Syrah de 2006

Comparando esta añada con la del año pasado, uno echa de menos aquel vino redondo, pleno, sabroso y lleno de delicadeza.

Y no es que este sea un mal vino, pero pierde elegancia en su paso de boca con un tanino mejorable y por madurar.

La capa es media y el color rojo con tintes violáceos, el aroma sigue con su mezcla de aromas especiadas y amaderadas.

Esperemos que la añada de 2008 vuelva por sus fueros dado que es una bodega de gran potencial y que cuenta con un grandísimo terruño en La Alcarria.

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