Decente garnacha joven. Mineral

En bonita botella con tapón de rosca. Color picota intenso de capa media y generosa lágrima.

Agradable nariz, pimienta, pizarra, fruta roja, en la buena onda de una buena garnacha.

Entrada agradable y generosa. Retronasal acorde a lo que percibimos en nariz. Te deja una rica sensación de buen vino en la boca tras cada trago. Muy agradable mineralidad. Se defiende bien.

Buen precio pero con un pero: beber rápido una vez abierta la botella. Muere en un día. Además, el tapón de rosca no permite conservación a vacio.

Ideal para una comida entre amigos sin mayores pretensiones.

Rico, aunque me decante por garnachas de Cariñena y Aragón.