VISTA: Picota oscura muy cubierto de bordes amoratados, limpio y brillante.
NARIZ: Elegante y de media intensidad. Muy frutal. Notas de fruta roja (fresón y cereza), violetas y puntas de chimenea y regaliz.
BOCA: Frutal y dulzón. Rico. Tacto suave y elagante, pero con brío. Recuerdos de caramelo rojo.

El servicio se inició a 16º, sin decantar, abierto una hora antes. Al principio se mostraba muy cerrado y poco expresivo, pero a medida que le fuimos dando tiempo y un par más de grados de temperatura, empezó a dialogar. Empezó a aparecer un vino que destaca por su carga frutal, sin excesos de potencia, con elegancia y muy resultón. Buen corcho y precio que no llega a los 12 Euros. Nos gustó más su boca para besar, que su nariz para respirar.

Color moras intenso, sin transparencia y gota densa. Al entrar en paladar es fuerte y amargo pero despues deja un suave sabor a cerezas. Su olor atrae a las maderas nobles y a la tierra mojada del pais, sabores tostados combinados con el chocolate amargo con un punto de tinta china.

Me ha gustado porque tiene ese sabor amargo uqe tanto me gusta de ciertos tintos, en fin como para ponerlo en un casamiento por todo lo alto en las Vegas.