Último encuentro con uno de mis vinos favoritos de L'Empordà.
Un tinto de una bodega, que es capaz de ofrecernos muchas cosas buenas, añadiendo al conjunto una atractiva RCP, teniendo en cuenta la elaboración y el potencial incluso de guarda, para aquellos que gusten de comprobar su evolución.

Viste un picota granate oscuro, de capa media-alta- alta. Abundante lágrima, fina y bien definida en el cristal de la copa.

La nariz es realmente la que me espero de este vino, tras haber probado tres o cuatro añadas anteriores.
Atractiva y exhuberante. Aparece la fruta roja y negra en mayor medida, algo compotada y licorosa.
Balsámicos que asoman en esta fase de forma fragante. Regaliz, mentolados...Algo de monte bajo Mediterráneo. Como también sucede en otras ocasiones, la madera y la barrica "se esconden", sin merma no obstante, de restar atractivo al conjunto.
El láctico y el cacao, a diferencia de anteriores años, aquí son testimoniales.

En boca, es cuando nos damos realmente cuenta del estado de este vino ahora mismo. Siempre que he bebido este vino, lo he hecho con un par o tres de años en botella. Éste 2011 también es el caso, pero a diferencia, todavía no ha alcanzado ese nivel de agrado que, pongamos, un 2008 o un 2007.
Tiene una acidez presente; un tanino vivo, secante; aunque incluso de esta guisa se sigue bebiendo bien. Frutal, rugoso; rústico. Esta boca está por mejorar en el tiempo, creo que un par de añitos más. Licoroso y con un final secante en el paladar y postgusto largo. Retronasal ahumado y tostado (la crianza!! ya no me acordaba!!).

Espero volver a beberlo y quizás en el tiempo, esa boca madurará y nos dará más satisfacciones.
No sé si llegará al nivel de otras añadas ( que con la misma edad estaban estupendas), aunque desde luego no se le niega las maneras y la cuna de donde nace este tinto de L'Empordá.

http://www.youtube.com/watch?v=HO1OV5B_JDw