Una cerveza curiosa y extraña, con bastante presencia del romero, pero cremosa y fresca. Color amarillo ámbar, con poca espuma. En nariz aromas intensos a caramelo, tostados, algo a miel y mucho romero. En boca entra bien, cremosa, buenos amargos, fresca, algo golosa. Bueno curiosa y sorprendente, pero me ha parecido un poco rara......

Una cerveza artesana diferente.

Muy suave y que quizás no destaca por sabor y olor en un primer momento. Interesante para acompañar platos tipo pescado, comida japonesa, ...

La Socarrada la mejor cerveza del mundo ????. Para quien señores y señoras ??. El jurado estaría compuesto por la familia Romero????.

No describo nada ya que solo huele a romero por encima de todo y algo a malta.

En boca vuelven los aromas de romero que te impiden, a quien no nos gusta, disfrutar de la cerveza.

No pude terminarla, casi media botella fué al fregadero.

La califico con un 5, por respeto al trabajo que se realiza.

Un caldo para condimento de pollo o conejo. Nula de carbónico por lo que no genera nada de espuma, de color marrón claro nada visual y sabor poco apetitoso. No es una cerveza, es un invento a largo plazo fracasado. Es para probarla una ocasión y no repetir. Precio excesivo por ser un producto respaldado por una buena comercialización y dudoso marketing.

1/3 En copa abierta, buen cuerpo, color miel intenso, espuma potente y permanente... pero si esto es una cerveza yo soy Brad Pitt.

Es un brebaje con un aroma muy intenso a aceite de romero, al paladar es puro aceite de romero. No es que tenga un ligero recuerdo... es que no se paladea cerveza en ningún momento.

IMBEBIBLE.

Pues discrepo con Mr. Higón. Me gusta el romero, mucho, pero otra cosa es la combinación resultante con las notas de miel, que también son evidentes, me recuerda en parte a los aromas que desprenden desde la boca uno de esos caramelos destinados a suavizar la garganta. Sin embargo y tras dos tercios, el mayor recuerdo que me queda es el de unas aceitunas aliñadas con romero y otras hierbas. Melosa, de gas integrado, dulce... le falta garra. Esperaba más, quizá por lo que decía de que me gusta el romero. Bien por una elaboración original y por el interés que despierta, pero en mi caso, no encuentro la frescura que necesito. ¿Y para la paella?

Color ámbar anaranjado de aspecto tupido con buena formación de espuma persistente, de tonos marronosos.
Aroma intenso a romero, resina, sobre fondo de suaves lúpulos, agradable pero diferente.
En boca es suave, persisten las notas herbáceas del romero y dulces amielados, quizás de hecha en falta cierta amargosidad para ser una cerveza, pero es agradable al paladar y de media persistencia.
Tomada en botella de 75 cl.

Pues esta vez y sin elemento comparador de botellin, servida recien abierta en la mesa, pareció que el carbónico y la intensidad en boca era menor. Desconozco si se trata de diferentes momentos de elaboración, o de tiempo en botella, peor si bien la vez pasada me sorprendió favorablemente, esta vez la sensación es que el recuerdo era mejor.
Sigue pareciéndome una buena cerveza y a quien no la conoce, siempre sorprende ese aroma que piensas que es paella, que es romero, que es de origen evidente valenciano.

Probadas en botellin y en botella de 3/4 y la verdad es que no se aprecian diferencias de calidad ni sensaciones. En otros casos la de botella grande suele dar sensación de más floja, de menos gas, de menos espuma, de menos persistencia .. pero en este caso se hacía indistintas las cervezas de ambos envases.
Quien la prueba por primera vez encuentra unas sensaciones de cerveza diferente: miel de romero. Una presencia muy personal y original.

Esta vez en botella de 75 cl.
Mismas sensaciones del romero de la paella (aunque ya Paco Higon me aclaró que no viene de ahí el nombre).
Muy buena presencia. Muy destacable color tostado. Aromas sobre todo de romero.

Una cerveza interesante