Ni idea tenía de la existencia de éste vino. Hay que reconocer que un buen diseño llama la atención. Y un buen precio también. Al final, después de una dura batalla contra la cera que sustituye al plomo, después de abrir la botella... Sorpresa! Un vinete la mar de divertido, lleno de sabor y matices. De color algo oscuro. La vista, como casi siempre, nos engaña y parece que el vino será duro como la piedra. Pues no; fresquito y agradable, con cuerpo pero bien armonizado. En el buen sentido de la palabra es vinoso, aromático (hierbas secas, plátano, melón), placentero, diferente, original. Bravo. Me gusta mucho.
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