Compré este vino porque lo vi de oferta, por poco más de 6€. Esta marca es con la que hace ya tiempo me inició en el mundo del Riesling. La poco oferta que había por entonces en Valencia, me hizo consumirlo en cantidad y he probado prácticamente toda la gama de sus productos. Lo cierto es que hacía ya algún tiempo (tal vez tres años) que no retomaba estos vinos, así que al verlo con buen precio me decidí a comprar una botella y probar.
Color amarillo dorado con reflejos verdosos.
Nariz de intensidad media con aromas de frutas con hueso, algo de albaricoque, de melocotón verde, con unas notas florales muy suaves y un toque de frutos tropicales, como la piña. Le falta algo de definición en nariz, pero no está mal.
En boca tiene una acidez algo justa, tal vez la peor carencia que he encontrado en el vino. Bastante fruta pero exceso de azúcar residual que, unido a esa falta de acidez, lo hacen algo difícil de beber. Tiene un recorrido medio, escasa persistencia.

No me acabó el vino, lo vi falto de "chicha" a pesar de su expresión varietal.

Botella bordelesa, cápsula plástica, corcho correcto, etiqueta clásica, contraetiqueta con información en castellano y portugués, color amarillo claro, limpio y brillante.nariz intensa de fruta dulce: piña madura, caramelo.
Pleno en boca, carnoso a la par que elegante, muy rico, muy buena acidez.