Y cuatro años después ...

Cuatro años después de haberlo probado por primera vez, me topo de nuevo con este vino que le compré hace cuatro años a una colega y "paisana" muy querida que lo trae a México.
Los años no han pesado y el vino continua en forma estupenda.
Color cereza muy oscuro y opaco. Lágrima abundante que cae muy lentamente.
En nariz es una gozada. Ante todo se percibe una fruta negra intensa muy maduro, incluso en confitura, sobre un fondo especiado. Algo parecido al aroma que se desprende al cocinar confitura de moras con sus especies (como canela, por ejm). Al airearse aparecen notas balsámicas, notas a maderas finas, cedro tal vez, ... de la mejor calidad. Se percibe también notas a cacao oscuro. Todo el conjunto muy complejo e intenso, sobre todo para un vino con 10 años de edad. EMHO podría evolucionar favorablemente por unos 3-5 años mas.
En boca se percibe de nuevo esa intensidad frutal con notas que recuerdan al chocolate oscuro, y notas especiadas (menos que en nariz),taninos aterciopelados y un postgusto muy largo. Goloso, cálido, no satura gracias a su excelente acidez perfectamente bien integrada.
En resumen un muy buen vino, mas intenso que elegante, pero muy rico. Solo esta buenísimo, sobre todo en esta época de frio, pero acompañado con un buen guiso como los que se preparan en el Pirineo catalán, debe ser una gozada.

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