De los que siempre dejan huella

Degollado en 10-13.

Nueva botella de este fantástico vino del que ya tenemos más de un comentario de cata subido, que por desgracia tenemos pocas ocasiones de catar que desde luego no desaprovechamos. Como siempre muestra un color piel de cebolla y una burbuja tenue, con una aromática compleja y profunda, todavía por desarrollar, frutos rojos, especias, ahumados, frutos secos, un fondo mineral…mucha materia por debajo. En boca se muestra compacto y apretado, con acidez y estructura, mucho carácter frutal y un carbónico bien integrado, dejando en el final sensaciones de frutas rojas, especias y un punto amargoso muy elegante. Largo y persistente.

Pues eso, uno de nuestros Champagnes rosados de referencia, en este caso todavía un poco joven pues necesita de por lo menos un par de años más de guarda para ir ganando en complejidad en nariz, pero con toda la materia que esperamos del vino más personal del maestro Selosse. El problema es que ya está por encima de los 150 euros y cada vez será más complicado beberlo…

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar