Fresco y elegante

Vino francamente bueno y distinguido, con sabor persistente y agradable que, a mí gusto ya lo voy diciendo, cada año va ganado. El 2007 le queda mucho por deciren botella, pero apunta a un gran vino. La labor de Alvaro Palacios en esta bodega familiar, seguro que se está notando. Color cereza brillante y con ribetes violáceos. En náriz aroma limpio, intenso, con finas notas de fruta roja y madera bien integrada al fondo. En boca es fresco, a pesar del tiempo de madera, elegante, equilibrado y de largo recorrido.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar