Amarillo dorado, de un dorado intenso y refulgente. De gran limpidez y transparencia. Con brillo de joya líquida y femenina. Hace gala de una burbuja abundante, que forma profusos racimos que coronan en diadema blanca de crujiente espuma.

Aromas tenues y sutiles, elegantes y refinados, interpretados en la partitura frutal de las manzanas dulces asadas y las notas cítricas del pomelo rosa, matizados por la riqueza cromática de los tostados de levaduras, de bollería fina, y adornados por la delicada fragancia de las flores amarillas y la exquisitez complaciente de las almendras frescas.

Los sabores se expresan con firmeza, sinceros y francos, envolventes, en la intensidad aromática de los tostados, de las notas cítricas y de fruta blanca madura y fresca, con una acidez afilada, vivaz, a la par que totalmente integrada en el sugestivo discurso sápido del vino. Los ligeros amargosos, que despuntan con gracia, no hacen sino aportar seriedad, finura y elegancia, a un paladar que es a la vez amable, armonioso, refinado e increíblemente placentero. De una gran longitud.

Sin duda, Le Mesnil está presente en cada sorbo de este vino.

Amarillo dorado brillante.

Comienza con notas de bollería y fruta madura, inicialmente de manzana asada. Después aparecen notas frutales golosas, cítricos (naranja y limón escarchados), suave fondo floral (flor blanca), ligeros matices de frutos secos y un brioche muy destacado. Complejo y potente, con mucha bollería y corte goloso.

En boca tiene un buen ataque, muy buen paso y amplitud, con un levísimo amargor final. Muy equilibrado en boca y muy estructurado. Es un estupendo vino para comer.

Me explico, compre dos botellas en Enero y una la abri al poco de comprarla, me desilusiono un poco, el carbonico no estaba integrada y destacaba mucho.
Esta botella despues de unos meses a mejorado mucho, en nariz destacan los aromas de bolleria y la fruta, sobretodo manzana asada, citrico y mineral.
En boca el carbonico esta integrado, buena acidez, muy fresco, llena el paladar, destacan los citricos y la mineralidad, con un final largo algo amargo que deja buen sabor de boca.

Color dorado palido. Con finas y abundantes burbujas. Brillante.

Mariz intensa y madura a peras y manzana asadas. Nariz densa con notas de chocolate blanco y recuerdos lacteos.

La boca es como la nariz madura , crenosa y densa. Con el carbonico integrado, y buena acidez. Con suaves notas de madera acompañadas de suaves notas de manzana como en nariz. Con magnifico recorrido y potsgusto largo. Se bebe magnificamente no siendo ligero.

Dorado pálido con burbuja media y abundante.
Aromas de buena intensidad en los que destaca la excelente interpretación varietal y sobre todo de terruño. Huele a Le Mesnil y con esto casi sobran más palabras. Nota evidentes de autolisis, levaduras, bollería recién horneada, brioche, toques cítricos de limón y pomelo, ligeros recuerdos florales y un fondo mineral elegante y discreto, siempre con mucha limpieza.
En boca resulta rico, elegante, cremoso. Acidez muy lograda e integrada (tenía mis miedos al llevar una parte de 2003 en el ensamblaje), pero está fresco y bien delineado. Paso limpio y elegante con un final muy cremoso y estructurado, dejando unas sensaciones amargosas muy placenteras, como de frutos secos y cítricos. Magnífica integración carbónica.
Hay que felicitar a Jordi por su buen gusto al elegir personalmente el ensamblaje de esta Cuvée porque sencillamente es un champagne que no engaña: huele y sabe a Le Mesnil y con esto ya está dicho todo. Creo que puede guardarse un tiempo, pero lo he notado ya muy pulido y listo para su consumo. Buen trabajo Jordi y a seguir adelante con este proyecto. La base ya está hecha y no harás sino mejorarla.

En una pequeña bodega de productores artesados, este inquieto elaborador, asesor vitivinícola y colabarador mediático en diversos formatos y empresas de reconocido prestigio, llamado Jordi Melendo, se ha encargado de la producción de una pequeña 'cuvèe' propia, en el privilegiado marco de Le Mesnil, meca del 'blanc de blancs', el mejor terruño para la chardonnay.

Es un placer poder catar este Champagne Philippe Gonet "Cuvèe Jordi Melendo", Blanc de Blancs, Grand Cru 100%, elaborado con una selección exclusiva de las mejores uvas de la casta chardonnay, nacidas en los viñedos de la Côte des Blancs, donde en el que queda reflejada toda la complejidad del "terroir".

La cata nos evoca a tiempos sublimes, a mil recuerdos, a momentos mágicos, las sensaciones encontradas explican cuando un vino de color amarillo paja es mucho más que un Champagne.

Olfativamente se presenta con mucho atractivo, por una parte aparecen notas exquisitas de manzana asada en compota, la melosidad de la miel que se reflejará en su graso paso de boca. Los frutos secos aparecen de fondo para unirse a las sensaciones cítricas que refrescan y le proporcionan extraordinario viveza.
En boca se muestra equilibrado, acompañado de buena acidez, donde el carbónico se encuentra muy integrado, dejando sensaciones frescas en el paladar y tersas. El final largo y rico en matices maduros y minerales que se reproducen en el postgusto.

Describir con una palabra este complejo champagne es imposible, pero mi soberbia me lo permite "Una exquisitez querido Jordi".

Dorado. Tiene una nariz de buena intensidad, de corte maduro, con notas de levaduras y bollería y algo de flor blanca. En boca mantiene el carácter maduro, con un ataque de buena intensidad, con buena acidez, el paso es cremoso, con buena integración del carbónico, largo, equilibrado y con un final ligeramente amargoso. Siendo amigo del elaborador me abstendré de puntuar... además quien puede valorar un sueño hecho realidad???