Tras una debacle Wifi, que nos desconectó de la cata, ahí va la nota:

Tras una debacle Wifi, que nos desconectó de la cata, ahí va la nota:

Aspecto General: La botella, en una primera impresión, no responde a lo que esperado del vino “tope de gama” de esta bodega. Se lleva “otra” presentación. ¡¡Que no me cambien el tapón!!.

Visual: Color picota oscuro de capa altísima con pequeño ribete morado, opaco, brillante y con lágrima densa que colorea la copa; color precioso.

Olfativa: En nariz, fruta madura, ciruela, mora, cacao, notas licorosas (guindas en licor), suaves tostados, notas de verdor y balsámicas

Gustativa: En boca da claramente la sensación de ser una muestra de barrica; tiene mucho que pulir. Ataque con bastante acidez, taninos algo secantes. Final persistente, retrogusto frutal: ciruela y mina de lápiz.

Conclusión: En este momento, no está para beber, le falta mucha botella, por lo que no lo puntúo.

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