¡Increible!.

Han transcurridos 25 meses desde la última botella bebida y catada de este sorprendente vino. Esta si que es la última. ¿Que me he encontrado?. Pues...que el vino sigue vivo y muy vivo. ¡increible!. Un rosado con 13 años de vida y para segur viviendo y sin crianza en roble.

       El corcho en perfecto estado. He abierto la botella con un sacacorchos de láminas. Está tintado por la cara que está en contacto con el vino.

      A la vista un color rojo rubí y teja. Limpio y brillante. Sin nada de precipitación. Muy buena densa, abundante y lenta lágrima en su carrera por el cáliz de la copa. Ribete Teja y rubí.

      En nariz complejas frutas rojas muy maduras. Notas de cerezas y fresas.

      En boca está muy vivo. Ha perdido la frescura de sus 1-3 primeros años, pero ha ganado en complejidad y mineralidad. Mantiene fruta, volumen, finura, elegancia, equilibrio y acidez que te invita a beber y que le puede dar otros 1-2 años de vida, pero no lo podré comprobar. Es mi última botella. Muy grato y elegante paso de boca. Sigue siendo un vino muy largo. Me da una permanencia de 2, 45 minutos.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar