Un Yquem que sorprenderá

Catado de una media botella hace unos dias.
Precioso vino blanco amarillo dorado de mediana intensidad, glicerico y espeso en copa, de abundante lagrimeo.
Nariz fina y vinosa, no es una añada sobresaliente pero es un Yquem de fondo, las notas de botrytis se perciben pero no dominan, los ajerezados se comienzan a insinuar pero sin llegar a las notas de "rancio" ni de evolucion oxidativa que otras catas han reseñado(posiblemente defecto de botellas no bien tratadas). al irse oxigenando, sobresalen las mejores notas de barrica francesa nueva que se van uniendo a finos mentolados y balsamicos que desembocan en toques de mermelada de albaricoque. Cada vez que se agitaba la copa volvia la frescura vinosa. En boca es una delicia de equilibrios, más azucar hubiera sido pesada, más acidez chirriante, más crianza hubiera tapado la fruta. es de ataque consistentemente frutal sobremaduro, posee la densidad de paso esperable, una acidez que le da frescor y dinamismo y acaba en unos puntos amargosos de corteza citrica muy aperitiva. Mi experiencia con viejos yquems me hace pensar en una guarda de al menos una decada más hasta ir llegando a su madurez plena, cuando en nariz ya no parece un Sauternes frutal sino un amontillado tocado de dulce. Y aviso para navegantes, por ahi se guardan muy mal estas grandes botellas y la luz acaba haciendo mucho más daño del que parece a estos blancos embotellados en cristal transparente.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar