Fotos:
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Gran vino y maravillosa velada con mi esposa
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Contraetiqueta
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Las croquetas de rabo de toro y parmesano
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Las flores de calabacín con queso
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Con el gazpachito de ostras
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Con el bacalao con callos
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Con la dorada al horno
Delicioso y amable.
NOTA DE CATA:
9.03
CALIDAD-PRECIO:
8,5
Estamos mi esposa y yo en un fabuloso restaurante de Benicasim, en plan novios, y nos pedimos este vino para la cena (aunque ella no bebe, para brindar ):). Nos lo sacan atemperado de la vinoteca y nos sirven a unos 10°C. Un tercio de botella que quedó me lo llevé para casa, en donde hice su valoración al día siguiente con más calma.
VISUAL: Su color es amarillo pajizo, con reflejos verdosos, limpio y cristalino. De lágrima fina y abundante (88).
OLFATIVA: A copa parada encontramos aromas de ciruela amarilla. Agitamos y desprende notas de fruta con hueso (albaricoque) y de fruta blanca (pera conferencia y manzana roja). También despuntan fragancias florales de jazmín y un puntito herbáceo de hinojo. De intensidad media y muy rico en complejidad (89).
GUSTATIVA: Buen punch, de alta acidez y tremenda amplitud. Cremoso en su paso por boca desprendiendo aromas retronasales de flor blanca y con un post-gusto muy sabrosote, de cuerpo medio, en donde encontramos de nuevo la fruta blanca, algo de coco y un atisbo de fruta tropical (lichi). Persiste en boca un minuto y 50 segundos. Delicioso y amable, en un momento óptimo de consumo (91).
La RCP atendiendo a su precio en tiendas en torno a los 15 euros me parece muy buena. En el restaurante obviamente, no tanto.
MARIDAJE: La verdad es que nos metimos una cena pantagruélica y exquisita. De entrantes unas croquetas de rabo de toro con parmesano y unas flores de calabacín rellenas de queso y miel de miso. De primeros, un gazpacho de ostras en su propia agua y huevas de trucha, y un lomo de bacalao en parmentier con callos ibéricos. Y para terminar un entrecotte de vaca madurada 40 días. Lo disfrutamos con todos y cada uno de los deliciosos platos. No obstante destacaría el maridaje con el bacalao. Las notas salinas y el puntito especiado e intenso de los callos, contrastaron maravillosamente con el carácter fresco y frutal de nuestro fantástico verdejito. Gran cena, exquisito vinito, en compañía de mi amada media naranja. De ahí al cielo!!. Decir que en mi casa, al cabo de unos días, me termine la botella con una doradita al horno que quitaba el hipo ):
Salud-os!!