Tiene el perfil de albariños de la casa, florales y dulzones, pero éste es muy bueno. En nariz te atrapa y en boca su untuosidad y aterciopelado paso es brutal, con un final dulce , no excesivo que seduce. Lo mejor que he probado de la bodega

De color dorado claro, brillante y con ribete pajizo, muy luminoso y limpio.
Nariz intensa de melocotones recién cogidos, maduros y sugerentes, acompañados de mango y níspero, jazmín y azahar frescos, con un hilo mineral, sutíl desde el inicio. La fruta lo envuelve todo, carnosa y dulce. Al fondo algo de piña, puntas salinas y granito. Al rato se torna más untuoso, con aires de mantequilla, ahumados finos y crema de limón.
En boca es graso, lo que combina muy bien con la fruta haciéndola más sabrosa y persistente en todo momento, con un toque amielado, piña dulce, melocotones frescos y cítricos confitados. Al paso es algo goloso, con acidez algo justa, aun así se bebe muy bien, tiene volumen y textura agradable, con final de boca afrutado, con recuerdos de níspero y fruta de hueso bien madura, flores y cítricos. Longitud media.

Esta bodega supo hacer un buen marketing en su principio para darse a conocer con su albariño básico, pero este Vintage va en serio, después de casi 7 años parece un bebe en pañales.

En nariz es expresivo, se aúnan los aromas de flores con los de fruta para hacer un conjunto aromatico muy agradable, notables amielados, notas de ligeros tostados( diría que son las lias), especias y cítricos, hierbas aromáticas.

En boca es sabros, estupenda acidez que aporta frescura, elegante, la fruta esta mas presente que en nariz, matices de mineralidad y algo salino, final largo con un punto dulzon.