El vino Quinta da Fata Clássico 2012 tiene unos primeros aromas de fruta y aceituna negra a las que siguen verduras asadas: pimiento rojo, berenjena, minerales de piedra: grafito, pizarra y metal: hierro. Con más aireación aparece el tabaco rubio dentro de un bouquet muy fino y elegante.
Fresco y muy balsámico en ataque. Con desarrollo se hace más cálido pero sin excesos. Aparece el regaliz negro y las moras. Tienen un tacto aterciopelado y muy elegante. Es redondo, equilibrado, fino y mineral, ligeramente dulce sin empalagar.
24 horas después mantiene elegancia y tipo acentuándose las notas sápidas.
Un vino portugués muy rico.
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