Dorado intenso brillante, burbuja pequeña y escasa.
Buena intensidad en una nariz que rezuma personalidad por los cuatro costados. Notas de flor marchita, frutas muy maduras, manzana asada, albaricoque, un ligero fondo especiado y ahumado, frutos secos, piel cítrica. Con más aire surge un fondo mineral y balsámico. Maduro, complejo, intenso y encantador.
En boca es un vino todavía joven y algo apretado, acidez marcada, paso firme y estructurado, final largo y evocador dejando recuerdos de frutas amargas en madurez, frutos secos y ahumados, con un ligero toque herbáceo. Carbónico magníficamente integrado y buena persistencia. Irá a más.
Alexandre Chartogne es un joven talento del Champagne con un gran trabajo de viña y un estilo que recuerda al de su maestro Anselme Selosse, este vino es una mezcla de dos pagos que elabora por separado pero que por una incidencia climática tuvo que juntar en 2010. Champagne de marcada personalidad, muy bueno. Unos 48 euros.