No bastan cuatro pasos.

Es el mencía con menos tipicidad que me he encontrado hasta la fecha. De color intenso con el ribete violáceo. Nariz alcohólica y fruta roja, pero duro de pelar, quizá un fondo especiado, pero nada. Entra cálido en boca, se muestra rústico, ácido, agraz... No sólo cambian de color las huellas de la etiqueta frente a la añada anterior, el vino en si tampoco se parece, aquel tenía tipicidad. Ojalá cambie con tiempo en botella, pero ahora me cuesta creerlo.

Recomendado por 1 usuario

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar