Pajizo brillante con destellos dorados. La nariz es intensa, con cierto carácter maduro que me sorprendió, los toques de avellanas son curiosos, y los recuerdos a levaduras también... en el segundo plano encontramos la fruta -sobre todo blanca, y bastante madura- y algún apunte cítrico. En boca tiene buen ataque y una sutil salinidad, resulta cremoso, muy fresco, bastante vertical, con suaves amargos y notable longitud. Tiene una paso con carácter... Cuesta unos 7,5€ y los vale con creces.

Aroma intenso y con cierta concentración, es un vino lleno de matices, expresivo. Hay notas de manzana verde y de pera, junto a un aspecto cítrico fresco y jugoso, incluso cierta fragancia salina. El vino crece en la copa, hay notas florales, de miel, de pulpa de pomelo.

En la boca entra con agrado, la acidez, que ahora ha bajado, se agradece, en lo suave, meloso puntito goloso que se expresa, esta redondo. Hay una finas notas cítricas, tanto a hierbas como a pulpa. Es un vino sabroso, fresco, con entidad y con una acidez viva, pero elegante, que en ocasiones se muestra moderada y otras chispeante. Que bien le sienta el tiempo y el reposo en botella.