Un valor que nunca falla.
Tenía inmensas ganas de probar este vino, que por fin había sido reconocido por "el acólito" de Parker en Portugal con 94 puntos, cuando al excelente VINAZO de la añada 2004, solo lo había puntuado con 92 y a todos los catados por él, la máxima calificación había sido un 90.
El color es un picota rubi con borde granate brillante y atractivo.
Los aromas son de muy buena intensidad y sobresalen los frutos de varios tipos con excelente madurez y personalidad, flores, especias dulces, minerales, finos tostados, balsámicos, ahumados y monte bajo, mucha la complejidad y presente la elegancia.
En boca es idem. de lo mismo, el paso de boca totalmente equilibrado y redondeado con gran elegancia y expresividad, complejo y vivaz, como siempre con GRAN PERSONALIDAD,"( made in Miguel de Orduña Viegas Louro), taninos vivos y nobles, excelente retronasal y el final marawvilloso, largo y con gran persistencia y toques de finura y sobre todo caracter y temperamento.
Vinazo que todavía tiene margen de mejora y que durará muchos años en plena forma.