Me gustaría saber si han abierto otro restaurante los que llevaban el Sant Bartomeu, es una lástima perder experiencias como las que ellos te ofrecían.

lo cerraron hace un poco mas de un año, una lástima.

Cocina creativa y bastante moderna, sitio super agradable y buen servicio, están pendiente de ti todo el tiempo. Fue para nuestro aniversario y repetimos, cada vez que hemos ido disfrutamos más. Tienen unos buñuelos de bacalo con mermelada de tomate increíbles, están buenísimos y una crema de ceps en texturas con humo de romero escepcional. Abre todos los días de la semana, todo un lujazo, por que los lunes en Sant Cugat, no hay quien salga a cenar. La próxima vez que vayamos asaltaremos el tartar de bogavante con helado de espárrago y grosellas, aunque el rape con estofado de alcachofas es otro candidato. Precio muy equilibrado con la calidad.

El mejor de Sant Cugat, cada año que pasa lo hacen mejor. La ensalada de bogavante está superior, al igual que el solomillo de cerdo, sin ninguna excentricidad en la elaboración de salsas, la comida es ligera y deliciosa, sin dejar de ser elaborada.
Los postres están muy bien acabados, como el milhojas de manzana con helado de vainilla que se sirve en caliente y que es digno de pedir en cualquier época del año.
En fin, muchas gracias a este restaurante por ofrecernos un local de diseño, buena música de ambiente chill out (tipo Hotel Costes y demás...) y una comida excelente y muy pero que muy cuidada presentación.
El jefe se sala es muy agradable y se nota que le preocupa que los clientes se vayan satisfechos.

Agradable descubrimiento. Un local agradable, con una docena de mesas, un servicio muy correcto y profesional, una carta con unas 20 propuestas entre primeros, carnes y pescados, y una selección de vinos muy correcta, sin exageraciones. La comida está muy bien presentada, con contenido, partiendo de una buena materia prima. Excelente el sabayón de bogavante, las "espardenyes" con caracoles y "cansalada", el bacalao y el pato, así como los postres (torrijas y milhojas de plátano). Buen café y magnífico orujo blanco. Unos 55-60 euros por persona, más el vino.

Cada vez que voy me gusta más, esta en la linea de los mejores con un precio asequible. Excelente servicio, así como la presentación y producto. Carta algo escasa, pero con un menú degustación que varia diarimente. Altamente Recomendable.

Restaurante en la onda moderna, de cocina creativa, entorno de diseño, cocina a la vista y buen servicio.
En este caso tenemos una carta más bién corta (15-20 platos) pero con interesantes propuestas. Además está el menú degustación (40€) que varía según el día y que ofrece 6-7 platillos o medias raciones de la carta e incluso fuera de ella (con productos del día que no se incluyen en la carta).
El vino tiene un servicio impecable con copas tipo riedel, temperatura correcta y unos precios de ensueño: yo tomé un Cims de Porrera 2000 por 42€!!!!
Lllevan poco más de un año, pero apuntan alto y se les ve recorrido para ir afinando al máximo.
Una muy buena opción.

Un bonito restaurante, muy moderno y en la linea de los grandes.
La carta apenas tiene 15 referencias de las cuales 4-5 son primeros platos, y el resto se reparte entre pescados y carnes para el segundo plato. La carta de postres se presenta con la de la comida ya que algunos de ellos necesitan cierto tiempo de preparación.
En vinos,una carta correcta con un poquito de cada lado, sin cargar demasiado el precio final.
Precio medio por persona con postre y vino sobre 60€. Vale la pena probar, muy moderno y realmente correcto.