Volvi por una experiencia muy positiva hace ya tres años. En esta ocasion no se pareció en casi nada a la anterior. Han remodelado una parte del restaurante modificando sustancialmente su decoracion aunque las sillas siguen siendo las mismas. Mantiene un buen nivel en su entorno .
De primero tomamos pinchitos de langostinos con quesoy berenjenas envueltos en pasta brie de cabra ( buena pasta, exceso de queso y langostino insipido) y marinada de vieiras y carabineros y huevas de erizo (plato correcto, sin emocionar)
De segundo salmonete con patatas confitadas y setas salteadas : Pescado insipido y la combinacion de sabores muy deslabazada. Y Corvina con choquitos a la plancha y pasta negra : Lo mejor de este plato la pasta , bien cocida y con sabor. El resto de los ingredientes volvieron a dolecer de sabor y el pescado estasba pasado en punto de coccion
De postre bizcocho de chocolate con helado de vainilla y salsa de caramelo. , con demasiado helado , no estando bien conjuntados los sabores.
Buena carta de vinos con muchas referencias locales . El servicio del vino se limita a abrir y a dar a probar. El servicio no esta , ni de lejos acorde a su carta de vinos.
Servicio en sala con dos partes muy diferenciadas : Al princpio amable, cercano y diligente. En cuanto entro en la sala una mesa de clientes habituales , el servicio para el resto de comensales simplemente desapareció. Sólo dire que estuvimos mas de 15 minutos con los platos de postre sin que vinieran a retirarlos.
El precio es sin vinos.
De acuerdo con mi visita anterior y comentarios de foreros de trayectoria contrastada quizas fué un mal dia, pero no me han quedado ganas de volver