Esta era mi segunda visita en una semana, y quizás fuese porque la primera estuvo muy bien, pero esta segunda no acertamos las tapas.
Para cenar pedimos:
Canelón de berenjena; Es mató envuelto en tiras de berenjena. Para mi bien, pero para mi mujer muy soso, le faltaba o algo de sal o algo de miel.
Anchoas; Buenas-Normales
Canelón de setas con trufa; Impresionante, brutal,excepcional y otros adjetivos.
Patatas bravas; Abundantes, en su punto y muy buenas.
Pincho de ventresca de atún; Excesivamente graso, con exceso de aceite y demasiado hecho.
Salteado de Yakisoba; Muy bueno
Chipirones rellenos de butifarra; Aunque a mi mujer no le entusiasmaron, a mi si. Muy buenos.
Para beber pedimos un Pardas rosado 2009, mala elección ya que no llegamos ni a la mitad de la botella.
En esta segunda visita a este restaurante he visto que hay platos francamamente muy bien prepardos, por no decir excepcionales, pero hay otros que no han acertado todavía en su elaboración. Cocina algo irregular.
En cualquier caso, con esta nueva experiencia muy estoy obligando a volver otra vez, para seguir probando otras tapas.