Ayer visité este restaurante llevado por un amigo (yo soy de Barcelona). Mientras esperaba estuve en la zona de la Barra y estuve muy a gusto: no solo por el aire acondicionado, sino por un entorno agradable y un trato amable. Aproveché para tomar una copita de vino y una tapa consistente en un pimiento relleno de atún muy rico.
Pasamos al comedor de arriba y fuimos directamente a la carne. Yo pedí un solomillo gallego del que solo puedo decir que maravillas: Jugoso, meloso, se deshacia a los dos mordiscos. Me recordaba a un steak tartare. Para acompañar, pedimos unos pimientos de piquillo y unas patatas que no las había probado antes: Patatas con Yema. Muy ricas y sabrosas. Para beber pedimos el que me habían dado en la barra. Un Clásico donde los haya: Durón Crianza. Me sentó ayer más que bien. rematamos con cafes y unas copitas (les falta güisqui de entidad).
En resumen, muy buena carne, buen trato y entorno correcto. Precio razonable. Para volver.

Restaurante exclusivamente de carne con un concepto interesante, a la carta ofrecen carnes de distintos origenes, gallega, asturiana, retinta, argentina, wagyu (Kobe) ... y con distintos cortes. El precio va en funcción del peso, y cocinan todas las carnes al punto sobre carbon de encina, el servicio es amable y atento, la carta de vinos demasiada clasica y anticuada. Los entrantes son buenos y las carnes tambien el unico punto muy NEGATIVO desde mi punto de vista es que sirven la carne en un plato hirviendo por lo que la carne pierde su jugo, su ternura y sigue cociendo mientras la comes.
El otro pero, es la guarnición de las carnes que vienen todas con patatas asadas (un poco sosas) y pimiento en vinagre... no consigo entender porque los restaurantes se complican la vida cuando todo el mundo quiere patatas fritas caseras...!!
Para concluir, el concepto del Muu esta muy bien pero hay 2-3 cositas que hacen que no esta perfecto y que no permiten su total disfrute. De precio contar 40-50 euros por persona salvo para los que eligen el Kobe.