En el magnifico sentido del titulo, es una ruleta rusa de sabores, unos días te puede tocar un menú mas arriesgado, con elaboraciones mas internacionales así como con especies y productos exóticos y otros días, como fue el caso, un menú mas de la zona, con buen producto y elaboraciones mas clásicas, pero con la chispa de Alvaro y su equipo, eso es una constante , sea el día que sea y el menú que te toque.
Para mi esto es una virtud, quizás para otro no lo sea, a mi me encanta que cada día me sorprendan con una cocina similar, pero distinta, siempre divertida, siempre el sabor por delante.
Junto con el zarate en comida de producto, este local es mi primera recomendación para una velada divertida y diferente en el botxo, hay alguna otra opción, pero ninguna tan divertida, ni a tan buen precio.
El equipo de la sala consolidado y siempre atento a las necesidades del comensal.
Empezamos con Pannacota de ajo negro, muy de moda la utilización de este producto, a mi como ya he comentado me encanta, pero aquí es donde se nota la escuela de Álvaro, acompañado de un rico jugo de setas, gana mucho.
Ostra Gillardeau, ginebra y cítricos, magnifica manera de limpiar la boca a la vez que la pones a punto con esos sabores a mar.
Txitxarro ahumado al romero, coliflor y sidra, otro producto que esta de moda en los entrantes, vamos jurel, lo cual no quita merito al que como es el caso, lo prepara con mimo y sapiencia.
Lubina salvaje con crema de arbequina, buen producto y ya con la crema de este aceite tan suave y aromático, ni te cuento.
Foie, cigala y caldo de salvia y lima, como comenta Joan, rozando la perfección, siempre en los menús de la mina hay algún plato de mayores galardones, siempre será una apuesta para alcanzar la segunda estrella, para mi.
Pastel de tuétano, solo alguien preocupado por el sabor es capaz de jugársela con este producto y Alvaro, que ha estado en buenas escuelas, haya por las pedroñeras, fusiona su magia a la hora de cocinar con los sabores de productos que son , eso sabor.
Sangre, café y berza encurtida, otra genialidad partiendo de la premisa de la morcilla de berza y dándole ese toque amargo del café.
Merluza del Cantábrico con guiso de verduras de caserío, o cuando la merluza se hace amiga de la verdura, chapo.
Liebre a la Royal, aquí si que si se le ve el plumero manchego, es una elaboración potente, sápida y elegantemente controlada.
Empezamos con el dulce , Mole y cacao , con el toque picante , por lo que mas bien empezamos por el dulce-picante , te pone las papilas a punto para la crème brulée, emulsión de pera y amaretto , dulce y cremosa .
Y como es costumbre siempre nos ponen un pequeño aperitivo dulce para finalizar, Mousse de azúcar moscovado, helado de naranja amarga y yogurt, un clásico y que no quita sitio a los dulces petit fours que acompañan al café.
Para beber empezamos con un cava que ya conocía de la última visita y que me gusta mucho, Grimau Reserva Familiar Brut Nature a 21€+iva, a continuación un clásico en blanco, Viña Tondonia blanco reserva 1998 a 24€, de estas cayeron dos.
Y acabamos con un tinto , Luis Cañas, Reserva Selección de la familia 2008 , rioja alavesa que entro muy bien , a 30€+iva de postre copita de Olivares y el magnifico PX spinola , el olivares a 4,5€ y el PX a 10€+iva , me gustan los dos , pero creo que el olivares gano en las votaciones , creo , no estoy seguro , yo …por comentar .
Luego fue la oveja negra, que se tomo un martin millers y eso que los domingos no suelo, pero mi satisfacción me empujo a ello ,9€+iva, decir que es el mejor precio para gin –tonic, que últimamente me han cobrado en restauración.
Como comenta Jon, es sistema de puntuar es el que es, por lo tanto ateniéndonos a las reglas y dada la trayectoria de Alvaro, hoy voy a darle un 10 a su cocina, creo que es la primera vez, pero si hago una media y busco la regularidad se lo merece.