Tomamos un menú degustación (54 €) y nada estaba mal, pero nada sorprendía

Tomamos un menú degustación (54 €) y nada estaba mal, pero nada sorprendía. Un restaurante mas de los tantos que hacen cocina "creativa", una moda que ya cansa. Es cierto que el servicio de vino es muy bueno (envinado, decantador, copas, etc.) y el personal se nota con ganas de agradar pero al final no recuerdo ni un solo plato de los tomados (¿quizás un foie con naranja?). En resumen precio y comida razonables pero uno de tantos sitios que no aportan nada (tampoco desmerecen).
Si puntúo el vino con 4 es porque la carta es corta (su servicio es de 5).