Mira que tengo visitas a mis espaldas en este establecimiento y jamás me había atrevido con el menú. Sabíamos de su tamaño apocalíptico (Mila si lo había comido) y por ir casi siempre a la hora de cenar no nos la jugábamos. Esta vez, lo teníamos claro. Sabíamos que íbamos a comer y que íbamos a beber!
Tras una charla amistosa y decidiendo algún cambio (los menús los adaptas como quieras) empezamos el homenaje.
Tres aperitivos
1- Royal de foie, boletos y crema de garbanzos. Como empezaba el festín!
2- Boca bit de gamba con bacalao. Curioso entrante!
3- Croqueta de la madre. Esa besamel es de otra galaxia!
Empezamos con los entrantes
1- Tartar de salmón rojo de Alaska. Mira que nunca lo habíamos pedido, no roza la exquisitez del Steak Tartar pero esta realmente bueno!
2- Papada de Pío negro con cígala. Este plato lo habíamos probado y en su día me encanto. Este día también.
3- Guiso de pochas frescas. El plato que menos encandila, pero buenas están!
Continuamos con los pescados.
1- Rape asado. Perfecto.
2- Bacalao al ajoarriero. Nunca lo había probado de esta manera, no es que me fascine este pescado pero hay que reconocer que estaba muy bueno!
3- Salmonete a baja temperatura. Para mí, este producto Nacho lo clava.
Si, habéis leído bien. Tres platos de pescado y ahora llegaban las carnes. Pues no, después del bacalao preguntamos y dijimos que nos quitasen la carne, venían otros dos platos. Nos comentaron de poner un plato al centro y compartir pero ni de bromas, queríamos disfrutar del postre e íbamos ya algo tocados!
Postres
1- Huevo de corral. Lo probamos en su día, personalmente está bueno pero yo me decanto por otras cosillas!
2- Tiramisu en paisaje. Odio el Tiramisu, pero digo alto y claro que este lo comería todos los días!
Después de todo esto, nos comimos la trufa con el café.
Repetimos de pan. Aprendí a disfrutar en Diverxo de los menús sin pan, pero es que llegué con un hombre inhumano y no pude resistirme al pan recién traído.
¿Bebimos? Repetimos el de la última vez, Billecart-Salmon, una auténtica pasada lo bueno que está! También una botella de agua y una coca cola zero.
Fueron 68€ cada menú ( regalado ) y 85€ del champagne, más pan y esas bebidas.
¿Volver? Hasta el infinito, disfrutamos como niños cada vez que vamos!
Tiramisu en paisaje
Creo que nunca jamás he comido o cenado sin pan. Si me apuras casi preferiría "panear" sin cena. :-)
Ir a Solana es ganar la apuesta. Recuerdo una noche que después de meterme el menú, llegué a Laredo casi a las dos de la mañana, me puse las zapatillas y me fui hasta el Puntal. Pues nada, buen homenaje. Un saludo
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.