El lugar es muy agradable, sobre todo en un soleado dia de invierno entre semana ... como los otros restaurantes de la zona. Lo demas, comida y bebida mas servicio, psé. Lo que no es muy psé es el precio. Ya lo dije todo.

Hoy me he comido aqui un arroz negro de los buenos que he comido en mi vida, Paco y Manolo tan amable y profesionales como siempre, que arroz amigo al lado del mar.....ah y un PROTO robles 2003 que pasaba bien,

Lo mejor de este restaurante son sus vistas al mar en un buen dia, como hoy, en que las puertas pueden estar abiertas y te llega toda la brisa marinera si te toca una de las mesas privilegiadas con esa situación. El servicio de mesa es rápido y agradable. Pero ahí acaban los elogios. El servicio del vino es muy flojo: copas muy malas, no hay carta de vinos y las "recomendaciones" de la persona que nos atiende, aunque hechas de buena fe, son de las que creen que los clientes no tienen ni idea de vino, algo peligroso siempre. Me ha recordado la atención que recibía el vino en muchos lugares hace quince años. Hemos pedido un Viña Mocén 2004 ("el Rueda que tenemos"). Por otra parte, la comida deja mucho que desear. Los entrantes muy normalitos y la paella de pollo y conejo francamente insipida. Hacía tiempo que no tomaba un arroz tan poco inspirado. Quizás teníamos que haber optado por ese arroz negro que comenta Bosco. En nuestro caso, la experiencia ha sido bastante más floja que la que describe el otro comentario.

En la misma Playa del Saler junto a la Zona Deportiva y frente Camping del Saler, especialidad en paellas y mariscos, tomamos buenísimo arroz negro con muchos tropezones, además dorada a la sal gorda, y estupendas entradas muy frescas, aquí está todo fresco y la cocina casera de la Sra. Dolores, de verdad recomendable, en cuanto a postres recomendable, asimismo, el souflé de limón con nata acaramelada.
La carta de vino discreta, pero sí con representación de los de la tierra y alguno más.
Muy apropiado para visitar de paso que va con su familia a esta bonita playa valenciana y poder degustar, como decimos, un buen arroz dispensado por un gran profesional muy competente y amabilísimo PACO ayudado en todo por su hermano MANOLO, recomendable.